
Los homosexuales son presionados para ir a Ecosig
La orientación sexual y la identidad de género no son algo que pueda curarse, pues no son una enfermedad. Diversas organizaciones y especialistas se han pronunciado en contra de los Ecosig, también conocidos como las mal llamadas «terapias de conversión».
Recientemente, la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (ONUDC) reveló que más de la mitad de los jóvenes LGBT+ son presionados para asistir a estos «tratamientos».
De acuerdo con la ONUDC, más del 50% de los LGBT+ han sido presionados e incluso obligados a asistir a los Ecosig durante su juventud. Los principales impulsores de esto, de acuerdo a la investigación realizada por la ONU, fueron los propios padres de los jóvenes.

Este mes, en la investigación que se presentó en la guía Nada que curar, realizada por la ONUDC en colaboración con YAAJ México, se indica que entre los métodos utilizados para «curar» la homosexualidad se incluyen el acompañamiento religioso, «terapia psicológica» y en algunos casos las violaciones correctivas.
Las repercusiones entre la población LGBT+
El costo de ser obligados a ir a las mal llamadas «terapias de conversión» en algunos casos es muy alto. De acuerdo a la investigación, las personas que sufren esta presión son tres veces más propensos a sufrir depresión.
Asimismo, la ONUDC señaló que en las familias tradicionales se pueden llegar a presentar más de 50 conductas de rechazo a los LGBT+ por parte de madres y padres. Por esta razón, llama a las personas a evitar este tipo de prácticas que solo provocan daños en la población LGBT+.